Con motivo de la reapertura, el Museo Gregorio Prieto inaugurará una nueva zona expositiva: Obra Invitada en la que se mostrarán obras del pintor manchego pertenecientes a otras colecciones externas a los fondos del museo. La primera obra invitada al museo será el óleo Mi madre y yo (1927-1931), propiedad del Ayuntamiento de Valdepeñas.

Esta obra fue una donación que el propio Gregorio Prieto realizó al Ayuntamiento de Valdepeñas con motivo de la construcción del molino consagrado al pintor en su amada ciudad natal y que a finales del 2021 el Ayuntamiento de Valdepeñas ha cedido en depósito al Museo Gregorio Prieto durante el plazo de un año aunque ambas partes podrían renovar el acuerdo.
Este óleo tenía para Gregorio Prieto una especial significación, al tratarse de un homenaje póstumo a Froilana Muñoz, madre del pintor, quien falleció cuando Prieto contaba con tan sólo cuatro años de edad. En la imagen podemos contemplar a Froilana –para cuya efigie el artista se basó en una fotografía antigua– imponiendo un escapulario a su hijo, autorretratado también en el lienzo, como si dicha insignia fuese un talismán materno que le resguardara de las adversidades mundanas. Todo ello se aborda desde un esencialismo de progenie cubista, basado en el paisaje manchego.
Este óleo causó en su momento un gran impacto por su vanguardia y modernidad. Al pintor manchego Antonio López García (1963-) le causó un gran impacto este óleo en su juventud [Ver vídeo]